Chris Bouvette, jefe del equipo de asistencia de ventas de molienda para Canadá, lleva 18 años trabajando en Metso, y ha completado más de 600 inspecciones de molinos desde 2013. Tuvimos la oportunidad de ponernos al día con Chris y conocer los detalles de su trabajo de inspección de molinos y revestimientos.
¿Qué buscas en una inspección típica de los revestimientos?
Realizar una inspección minuciosa de un molino es crucial para mantener su eficiencia operativa y seguridad. La inspección inicial se centra en el estado general del molino, comprueba si hay desviaciones visibles como daños en los revestimientos causados por fragmentos de material, fisuras, patrones de desgaste irregulares o corrosión grave. Es esencial prestar atención a los posibles puntos de fugas, como bridas y puertas de acceso. También es conveniente observar los pernos del revestimiento desde el exterior del molino para identificar si hay fugas que pudieran indicar que el revestimiento ha superado su máxima vida útil o que un perno está roto o ha perdido la carga previa necesaria.
Al entrar en el molino por el muñón del extremo de alimentación, aprovechamos la oportunidad para comprobar el estado del revestimiento del muñón. Dentro del molino, buscamos cualquier objeto extraño o fragmento de metal y comprobamos el aspecto de la carga de medios de molienda, tanto en volumen como en condición.
Se realiza una inspección visual detallada de los revestimientos para identificar cualquier problema mayor, como acumulación de material entre los revestimientos, granallado, obstrucción de rejillas o revestimientos dañados.
¿Qué métodos utilizas para medir el desgaste de los revestimientos?
Existen varios métodos para medir el estado de desgaste de los revestimientos. Por un lado, el método tradicional de calibración con pasadores, aunque requiere mucho tiempo, ofrece gran precisión y respuesta táctil. Por otra parte, las técnicas modernas, como los dispositivos portátiles, ofrecen una forma cómoda de medir el desgaste en áreas seleccionadas. Sin embargo, el método más exhaustivo incluye un escaneado láser 3D que captura millones de puntos de datos, que luego se procesan en nuestro software patentado MillMapper. Este software no solo crea un mapa topográfico detallado del interior del molino, sino que además identifica las áreas más desgastadas, lo que permite darle mantenimiento específico.
El método más anticuado de calibración con pasadores se limita, por supuesto, a los revestimientos que se pueden alcanzar físicamente, y se miden uno a uno. No obstante, este método tiene sus ventajas, ya que es muy preciso y permite acercarse, ver y tocar los revestimientos, lo que puede aportar información adicional a un inspector experimentado. En algunos casos, los mejores resultados se obtienen combinando distintos métodos.